2 Timoteo 1:6 NBV“6Por eso te aconsejo que avives la llama del don que Dios te dio cuando puse las manos sobre ti”.
El fuego es un símbolo del Espíritu Santo. Esto quiere decir que la presencia de Dios está presente. ¿Hay fuego en tu corazón hoy por encontrarte con Dios?
En 1 Reyes 18, cuando Elías se enfrentó a los 450 profetas de Baal en el Monte Carmelo, insistió en que aquel que respondiera mediante el fuego, ése sería Dios. Cuando recibió la respuesta del fuego, destruyó a los idólatras. Yo no sé contra qué te estés enfrentando en este día, qué batallas tengas que lidiar pero si tú le pides a Dios que avive el fuego, te aseguro que así será.
Después de la ascensión de Jesús, 120 discípulos se reunieron en el Aposento Alto de Jerusalén. Se daban ánimo mutuamente en medio de la gran persecución y desespero en el que vivían pero aguardaban LA PROMESA: “El Espíritu Santo es la promesa de mi Padre”. Al final, llegó la fiesta de Pentecostés (Hechos 2:2-3).
Y de repente, tú estás leyendo, pidiéndole a Dios que haga algo distinto en tu vida, que te avive nuevamente y vas a sentir cómo del cielo viene sobre ti. El Espíritu Santo en este momento tendrás ganas de llorar, de reír, ganas de postrarte, sentirás un fuego dentro de ti. Y de repente, todos los males que te aquejaban, se van. Y de repente, esa enfermedad que te diagnosticaron sale de tu cuerpo que es templo del Espíritu Santo. Y de repente, esa relación que dabas por perdida se restaura. Y de repente, de no quedar embarazada, cuando venga el Espíritu Santo sobre ti, serás como María y el fruto de tu vientre será grande. ¿Si lo crees? Lo recibes hoy. Pídelo… Es para ti, es la promesa de tu Padre.
El fuego quema todo lo indeseable. Es el fuego del Espíritu Santo lo que te purifica. Todo lo pecaminoso es quemado (Hebreos 12:29).
El Espíritu Santo y Fuego es para tres tipos de personas:
- LOS QUE TIENEN HAMBRE: Los que están hartos de lo mismo y anhelan más de Dios. Tu vida tiene que depender de encuentros con el Espíritu Santo.
- LOS QUE TIENEN SED: Isaías 55:1.
- LOS QUE ESTÁN DESESPERADOS POR DIOS: Salmo 84:10.
Un sólo día en su presencia me basta, por eso es que este pequeño y corto espacio que tenemos lo disfrutamos al máximo porque estamos desesperados por tener un toque suyo, de su fuego, de su poder, de su amor.
¿Qué hace el fuego en nuestra vida?
El fuego purifica nuestra vida
Es como si entráramos a la casa del alfarero para que sea Él quien nos moldee, que quite todo lo impuro, lo imperfecto y saque a relucir la joya que somos tú y yo.
Números 31:23 El oro para ser fino, limpio, y puro tiene que ser expuesto a lo más intenso del fuego.Dios para sacar cristianos a prueba de fuego tiene que limpiarnos, purificar nuestras vidas y nosotros santificarnos por completo para Él.
El fuego estaba presente en todos los sacrificios
Y nosotros somos un sacrificio vivo para Dios.
Génesis 22:6 Todo sacrificio, es decir entrega a Dios, debía ser sellada con el fuego. Si nosotros queremos entregarnos día a día a Dios como ese sacrificio vivo, santo y agradable, tenemos que tener fuego en nuestro corazón por buscarle.
El fuego es protección de Dios para nosotros
Éxodo 13:21-22
El fuego nos da dirección
Deuteronomio 1:33
El fuego nos da respuestas del cielo
1 Crónicas 21:26
2 Crónicas 7:1
Después del fuego de la prueba Dios nos saca a abundancia
Salmos 66:12
Oración:Señor Jesús, quiero recibir más de tu fuego y ser transformado por medio de él. Purifícame, transfórmame y cambia. Te lo pido en el nombre de Jesús, amén.
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