Salmos 31:24 TLA “Así que, ¡sean fuertes y valientes, ustedes los que ponen su esperanza en el Señor!
Cuando tienes esperanza, vas a enfrentar la vida con valor. La esperanza nos infunde valor porque, aunque nuestro presente sea difícil, tenemos la seguridad de un futuro mejor. El gran general Napoleón Bonaparte dijo: “El valor es como el amor, necesita de la esperanza para florecer”.
Aquellos que han perdido la esperanza son los que enfrentan la vida con temores y dudas, pero nosotros debemos hacer de la esperanza nuestra fuerza. Recuerda: “Nosotros podemos vivir la vida con fuerza y valentía porque a pesar de los problemas, sabemos en quién hemos puesto nuestra esperanza.
Salmo 37:34 TLA “Pero tú, confía en Dios y cumple su voluntad. Él te pondrá muy en alto y te dará la tierra prometida. ¡Ya verás con tus propios ojos cuando los malvados sean destruidos!”
Las personas que han perdido la esperanza tienden a ser inseguras, cuando tenemos esperanza, la gente lo nota en nuestra forma de hablar, de pensar, de actuar y de vivir porque caminamos firmes, seguros, caminas con Dios de nuestro lado.
Hebreos 10:23 TLA “ Sigamos confiando en que Dios nos salvará. No lo dudemos ni un instante, porque él cumplirá lo que prometió.”
Podemos mantenernos firmes porque, a pesar de las adversidades, tienes la esperanza segura de que las promesas de Dios se van a cumplir en tu vida.
Salmos 33:20 TLA “Tú nos das tu ayuda, nos proteges como escudo. Por eso confiamos en ti.”
La esperanza te protege y te ayuda en tiempos difíciles. La esperanza te ayuda a mantener una actitud positiva frente a una circunstancia negativa y sobre todo, es un escudo contra cualquier pensamiento de incredulidad, de derrota o de fracaso.
Salmos 146:5 TLA “¡El Dios de Israel bendice a los que en él confían!
La esperanza es el mejor antídoto contra la tristeza porque mientras hay esperanza, no hay motivos para estar tristes.
Romanos 12:12 TLA “Mientras esperan al Señor, muéstrense alegres; cuando sufran por el Señor, muéstrense pacientes; cuando oren al Señor, muéstrense constantes.”
La Biblia dice que tengamos una esperanza segura porque sin ella no hay paciencia y sin esperanza no hay razones para orar. Es decir, la esperanza nos da razones para estar alegres, para tener paciencia y para perseverar en la oración, nos ayuda a ser constantes.
1 Timoteo 4:10 TLA “Por eso nos esforzamos tanto, pues confiamos firmemente en Dios. Él vive para siempre y es el Salvador de todos, especialmente de los que confían en él.”
El billonario Dale Carnegie dijo: “Los logros más grandes del mundo han sido alcanzados por personas que perseveraron cuando parecía que no había esperanza”. Cuando tienes esperanza, tienes ánimo de trabajar aun cuando el ambiente no te gusta y todo el mundo dice que no hay esperanza. Cuando las circunstancias te griten tira la toalla, la esperanza siempre te va a susurrar vuélvelo a intentar.
La esperanza es nuestro mejor motivador para seguir adelante y recuerda que no porque algo no está sucediendo ahora mismo, no significa que nunca va a suceder.
Leave A Reply