Es fácil confiar en Dios cuando todos nos está saliendo bien, estamos obteniendo buenas oportunidades, nuestra empresas está siendo bendecida y nuestra familia es saludable. No necesitamos tanta fe cuando la vida es buena. Pero ¿qué sucede cuando las cosas no nos están saliendo bien, nuestras oraciones no estás siendo respondidas, el problema no se está resolviendo y no estamos viendo favor? Muy a menudo nos desanimamos y pensamos, ¿Dios, por qué no estás haciendo algo? Trabajé duro, pero no tengo un aumento. Y pensamos que cuando cambien, seremos felices. Cuando conozca a la persona indicada, cuando mejore mi salud, cuando tenga ese bebé, cuando, cuando, cuando… esa es una confianza condicional.
Estamos diciendo: “Dios, si cumples con mis demandas, si respondes a mis oraciones en la manera que quiero y conforme a mi programa, seré lo mejor que puedo ser.
El problema con la confianza condicional es que siempre habrá cosas que no comprendamos, algo que no está sucediendo lo suficientemente rápido, algo que no funcione en la manera en que queremos.
Mi pregunta hoy es: ¿Somos lo suficientemente maduros para aceptar los NO de Dios? Dios es un Dios soberano. No vamos a entender todo lo que nos sucede. La fe es confiar en Dios cuando la vida no tiene sentido. Siempre habrá preguntas sin responder. ¿Por qué mi ser querido no sobrevivió? ¿Por qué no estoy mejorando? ¿ Por qué esta persona se fue? ¿Por qué me traicionaron?. Algunas no van a tener sentido. Pero Dios no lo habría permitido si no fuera a sacar algo bueno de ello. Quizá no lo veas en el momento, pero Dios, pero Dios sabe lo que está haciendo. Tiene mejores intereses en su corazón. No es el azar, no existe el karma. Es parte del plan de Dios. Tú ¡Atrévete a confiar en Él!
Dios no nos lleva en una línea recta. Van a haber giros, vueltas, decepciones, pérdidas, y momentos difíciles. Todo es parte de su plan. Si tu confianza es condicional te vas a desanimar y pensarás que estás en la dirección equivocada. Dios todavía está dirigiendo tus pasos. Confía cuando no comprendas.
Algunas veces queremos que las cosas salgan como queremos con tanta intensidad que no estamos felices a menos que salgan a nuestro modo.Mi mejor consejo para ti es “Entrégaselo a Dios, ora, cree y luego déjalo en sus manos” Clic para tuitear concédete el permiso para ser feliz hoy con lo que tienes. Es liberador cuando puedes decir: “Dios, todo está en tus manos. Confío en ti incondicionalmente incluso cuando no lo entiendo”
Recordemos Salmos 138:8 TLA “El Señor llevará a cabo los planes que tiene para mi vida, pues tu fiel amor, oh Señor, permanece para siempre.No me abandones, porque tú me creaste.”
Tú y yo no tenemos que llevarlos a cabo. No tengo que hacerlos suceder en mis propias fueras, tratar de manipular personas o pelear las batallas solo. ¿Por qué no te relajas y te quitas la presión y dejas que Dios obre con su plan para tu vida? Te aseguro que Dios puede hacerlo mejor que tu y yo. Él conoce el mejor camino.
Quizás sentimos que es ahora cuando las papas queman, ahora pusieron a calentar el horno, las buenas noticias que te tengo es que vamos a entrar allí, pero no estamos solos. Dios está con nosotros.
Algunos planes de Dios incluyen gigantes, otros mares rojos, otros fosos con leones, otros cuevas, otros una ballena, otros faraones e incluso personas que no te simpatizan. Algunas veces los obstáculos serán insuperables. Es allí que necesitas una confianza incondicional. ¡Dios nos va a librar, y lo hará bien!
¿Y si no lo hace? Tendremos una actitud de fe, cantaremos de alegría, viviremos felices, y mantendremos una confianza incondicional.
Leave A Reply