6 Junio – Firmes en nuestro Dios

En Daniel estaba sirviendo al rey Darío, el tercero de los reyes con los que él sirvió a lo largo de su vida y durante tres reinados, Daniel mantuvo un cargo de influencia y poder. Por ello, quisiera compartir tres consejos que nos ayudarán a mantenernos firmes en tiempos difíciles.

Consejo 1: Cuando Dios te levante, prepárate porque la gente va a querer derribarte.

Daniel 6:4-5 TLA “Los otros sólo esperaban que Daniel hiciera algo malo, o que cometiera algún error, para acusarlo con el rey. Pero no pudieron acusarlo de nada, pues Daniel siempre hacía bien su trabajo. ⁵ Por eso se pusieron de acuerdo y dijeron: «Como no tenemos nada de qué acusar a Daniel, lo haremos caer solamente con algo que tenga que ver con su religión».”

Debido a la excelencia en su trabajo y las extraordinarias de sus cualidades, el Rey estaba a punto de poner a Daniel al frente de todo el reino. Dios estaba a punto de promocionar a Daniel y esto hizo que sus enemigos empezaran a conspirar contra él porque siempre que Dios está a punto de levantarte, la gente querrá derribarte. La buena noticia es que si tú estás firme delante de Dios y Él es tu prioridad todo lo demás tiene que hacer fila. Los enemigos de Daniel no pudieron encontrar nada con qué acusarlo. Clic para tuitear

Y esto es algo muy importante, quítale las balas a los enemigos en contra de ti, que nadie tenga nada malo que decir de ti.

Cada vez que tú quieras avanzar, vas a encontrar resistencia. Si no estás dispuesto a enfrentar oposición, todavía no estás listo para experimentar la promoción. Clic para tuitear Pero no te preocupes cuando hay oposición, preocúpate cuando no hay oposición pues esa oposición que estás viviendo hoy es la evidencia que lo que Dios tiene para ti es tan grande que el enemigo está tratando de detenerte porque cuando Dios está por ti, no hay enemigo ni cueva de leones que te puedan detener. Clic para tuitear

Consejo 2: Lo único que te mantendrá en pie es estar arrodillado en oración.

Daniel 6:10 TLA “Daniel lo supo, pero de todos modos se fue a su casa para orar a Dios. Daniel acostumbraba orar tres veces al día, así que entró en su cuarto, abrió la ventana y, mirando hacia Jerusalén, se arrodilló y comenzó a orar.”

Nuestra primera respuesta frente a la oposición no debe ser tener pánico, ni intimidarnos o tener temor sino que debemos orar. Daniel no oró solo porque tenía un problema, sino que él oró porque era su costumbre, él oraba en todo tiempo y en todo lugar. Existen personas que piensan que Dios es un bombero porque solo lo llaman cuando algo se está quemando en sus vidas. Daniel tuvo el valor enfrentarse a leones furiosos y al hombre más importante en este entonces porque paso tiempo arrodillado frente a Dios.

Cuando estaba pasando por muchas necesidades llegué a un punto en el que casi no podía orar por mis necesidades porque eran tantas. Lo único que podía decir a Dios era ¡Auxilio! Y ¿sabes? Nunca me sentía abandonada, Él venía en mi rescate cada una de esas veces. ¡Me sacaba del problema! ¡Suplía mi necesidad! ¡Me ayudaba increíblemente!

Consejo 3: Cuando tú haces lo correcto, siempre puedes confiar en Dios los resultados.  

Daniel 6:22-23 TLA “Mi Dios envió a su ángel para cerrarles la boca a los leones, para que no me hicieran daño. Mi Dios sabía que yo no he hecho nada malo, y que tampoco he traicionado a Su Majestad. Al oír esto, el rey se puso muy contento y mandó que sacaran de la cueva a Daniel. Una vez que lo sacaron, todos pudieron ver que los leones no le habían hecho ningún daño, porque él había confiado en su Dios.”

Daniel no sabía, cuando entró a la cueva de los leones, qué le iba a pasar, pero si sabía que Dios no lo dejaría ni lo desampararía. Así que, él no entró a la cueva confiado en su fuerza sino confiando en su Dios. Daniel fue fiel con Dios y Dios fue fiel con Daniel.

Quiero contarte un secreto: “Ellos no tienen a quien tú tienes”. Sigue haciendo lo correcto, sigue trabajando y esforzándote. Dios te ayudará a salir adelante.

Daniel 6:25-28 TLA  ^“Entonces el rey Darío escribió un mensaje para todas las naciones y los pueblos de su reino. Ese mensaje decía: «Con mis deseos de paz para todos, ²⁶ ordeno a los habitantes de mi reino que adoren y obedezcan al Dios de Daniel. Su Dios vive para siempre, y su reino nadie puede destruirlo. Su poder será siempre el mismo. ²⁷ El Dios de Daniel puede salvar y libertar, y hacer grandes maravillas en el cielo y en la tierra. ¡El Dios de Daniel pudo salvarlo de las garras de los leones!» Y así Daniel siguió siendo una persona muy importante en el reinado de Darío, y también en el reinado de Ciro, rey de Persia.”

Como consecuencia que Daniel se mantuvo firme, tres cosas sucedieron:

• El nombre de Dios fue exaltado.
• El pueblo fue bendecido.
• Daniel fue prosperado.

Uno mi fe a la tuya creyendo que sucederá lo mismo contigo y conmigo, todos verán que Dios está con nosotros, seremos bendecidos y prosperados.