Jeremías 33:11 TLA “y volverán a oírse las serenatas de los enamorados, y los gritos de gozo y alegría. También se escucharán las alabanzas de los que van hacia mi templo llevando ofrendas de agradecimiento. Irán cantando: “¡Alabemos al Dios de Israel! ¡Alabemos al Dios todopoderoso! ¡Nuestro Dios es bueno y nunca deja de amarnos!” ¡Yo les juro que los haré volver del país adonde fueron llevados prisioneros, y todo volverá a ser como al principio!”
El mejor regalo que me pueden dar es una serenata y con mariachis, nunca la he recibido, pero me gusta tanto que siento que comienza la fiesta, así me sentí cuando leí este verso. Al mismo Dios diciéndonos: “Voy a darte mayor felicidad de la que antes has tenido. Muy pronto estarás gritando de alegría y estarás de fiesta, y lo que antes era tristeza y depresión, se convertirá en tu más grande felicidad, todo volverá a ser como al principio.”
Dios es bueno, repítelo por favor.
Nunca deja de amarnos.
Cuando aprendemos la lección, Dios cambia las cosas a nuestro favor, nos saca de la prisión, del hoyo, de lo más profundo como lo hizo con José. Cuando Pablo y Silas estaban encerrados en la cárcel y comenzaron a alabar a Dios, esa alabanza hizo que las puertas se abran. ¿Por qué? La alabanza a nuestro Dios hace que toda situación negativa sea cambiada.
Quiero decírtelo nuevamente, alégrate, canta, cántale a Dios, eso abre puertas, se va lo negativo, se sueltan las prisiones, te sientes en libertad.
Joel 2:25 TLA “¡Dios habrá de devolvernos todo lo que perdimos estos años”
La restauración total vendrá a tu vida cuando dejes de quejarte y comiences a agradecer a Dios por todas sus bendiciones.
Salmos 103:2 TLA “¡Con todas las fuerzas de mi ser lo alabaré y recordaré todas sus bondades!”
Despierta cada mañana agradeciendo a Dios por un día más de vida. El agradecimiento es la actitud de una vida productiva. Clic para tuitear En todo momento da gracias porque Dios está cambiando tu suerte. Puede que las cosas no siempre salgan a tu manera, pero no te desalientes, sigue adelante porque tu Dios no te dejará hasta que te haga grande:
- Dios cambiará esas finanzas que están yendo mal.
- Dios cambiará esos proyectos con los que estás batallando.
- Dios cambiará esa situación legal a favor tuyo.
- Dios cambiará esa enfermedad en salud para ti y tu familia.
- Dios cambiará esas cosas negativas en puertas abiertas.
Comienza a pedir cosas difíciles porque para nuestro Dios no hay imposibles. Nunca olvides el amor incondicional que Dios tiene para ti. Recuerda sus bondades, no te olvides cuando tengas abundancia; que la fama no se te suba a la cabeza. Aterriza. Recuerda todas las veces que no tenías, y Dios te proveyó de donde menos lo imaginaste.
Mantén tus ojos en Dios y podrás estar parado frente a cualquier obstáculo. Cuando te mantienes enfocado en Él, todo cambia… Clic para tuitear ¡Somos transformados! Comenzaremos a vivir como José, aquel que halló favor incluso en las épocas más difíciles. ¡Tú tendrás ese favor, como algo innegable sobre tu vida!
Favor viene de la palabra hebrea “kjen” que significa “gracia, aceptación y buena voluntad”. Dios puede y va a proveer favor sobre ti sin importar cuán desfavorables sean tus circunstancias.
José tenía el favor de Dios pues a pesar de ser vendido como esclavo, halló gracia a los ojos de Potifar. Lo echaron en la prisión injustamente pero incluso en la prisión Dios lo prospero. Creo que José sería el que hoy en día vende arena en el desierto. Con el tiempo, el favor lo llevó a ser el segundo al mando en el reino de Egipto.
José no necesitó el favor de sus hermanos porque tenía el de Dios, así sucedió contigo; no necesitaste un tarjetazo para entrar en las grandes ligas, para firmar grandes contratos, era Dios siempre abriéndote las puertas. José no necesito el favor de los demás prisioneros sino del que mandaba. Tú no necesitas ganarte el favor de la gente, si tienes el favor de Dios sobre tu vida, ¡es más que suficiente! Porque si lo tienes a Él, lo tienes todo.
Génesis 39:2 TLA “A José le fue muy bien allí, en la casa de su amo egipcio, pues Dios estaba con él”
¡Dios estaba con José! Eso es ser favorecido. Hay quienes piensan que están solos en esta vida. ¡Se equivocan! Dios está con nosotros ahora. Si Él está contigo por más que te encuentres en un lugar difícil o en una circunstancia muy adversa, siempre habrá un propósito para llevarte al palacio donde correspondes. Cuando llegues arriba, recuerdas las bondades de Dios.
Cuando compres esa casa que tanto soñaste, recuerda las bondades de Dios.
Cuando quedes embarazada y tengas a tu hijo en brazos, recuerda las bondades de Dios.
Cuando recibas tu primer sueldo o firmes un contrato, recuerda las bondades de Dios.
Nunca es por nosotros, ni por nuestras capacidades, o porque estudiamos y somos profesionales, SIEMPRE será por el favor de Dios para con nosotros.
Cuando hagas ese viaje y tomes una copa de vino frente a la torre Eiffel, recuerda las bondades de Dios.
Cuando te despiertes con salud, recuerda las bondades de Dios.
Dios es bueno, te ayudará a empezar bien, y cuando estés en la cima, recuerda sus bondades.
Leave A Reply