Tu actitud, ¿es de gratitud?
De todos los sentimientos humanos la gratitud es el que peor memoria tiene. Para mí la gratitud es la memoria del amor.
Colosenses 4:2 NBV “Nunca se cansen de orar. Oren siempre con gratitud”
Que horrible es ser una persona ingrata, es decir sin gratitud en su corazón. Aquella que piensa que se lo merece todo. Me sorprende aún escuchar a personas que cuando te piden algo siempre te dicen “gracias”, mientras que otros, nunca agradecen por el trabajo realizado o por una ayuda.
Si reconoces que Dios te ha dado tanto. Pídele algo más: un corazón agradecido.
1 Tesalonicenses 5:17-18 “Oren en todo momento. 18 Den gracias a Dios en cualquier situación, porque esto es lo que Dios quiere de ustedes como creyentes en Cristo Jesús.”
A veces no tendrás ganas de ser agradecido. Dios sabía que no siempre sería fácil. Tendrás que mantenerte firme y decir: “Dios, no tengo ganas de hacer esto. No parece que vaya a funcionar. Estoy cansado, y me siento solo y desalentado. Pero Dios, sé que tú sigues estando en el trono. Sé que tú eres bueno, y que lo eres todo el tiempo, y por eso escojo la gratitud. Te daré las gracias de todos modos.
Cuenta la Biblia que Pablo y Silas estaban encarcelados por compartir su fe, y habían sido injustamente golpeados. ¿Qué hacían ese mismo día a la medianoche? ¿Se quejaban? ¿Sentían lástima de sí mismo? ¿Decían: “Dios, no es justo, ¿dónde estabas hoy? No, ellos estaban cantando y dando gracias a Dios. Decían, en efecto: “Dios, sabemos que tú eres mayor que nuestros problemas. Sabemos que sigues teniendo el control. Tú puedes sacarnos de aquí”. A la medianoche hubo un gran terremoto, y las puertas de la cárcel se abrieron. Las cadenas cayeron, y Pablo y Silas salieron de allí como hombres libres.
¿Qué dio comienzo a todo? Que ellos agradecieron en medio del encierro.
Realmente cualquier puede tener una buena actitud cuando todo va bien. Todos podemos celebrar y estar agradecidos cuando estamos en la cima, pero ¿dónde están las personas que se levantan cada mañana y se preparan para una gran victoria a pesar de todos los malos informes? Creo que tú eres una de esas personas. Creo que tienes una gran fe, y tus raíces son muy profundas. Podrías quejarte; podrías desalentarte; podrías tener resentimiento. Pero en cambio, sigues con una actitud de agradecimiento. Sigues teniendo esa sonrisa en tu cara. Haces lo correcto aunque esté sucediendo lo incorrecto.
Que el final de la vida no te encuentre diciendo: ¡Qué maravillosa vida tuve! Solo me gustaría haberla apreciado y valorado antes.
Gracias, Dios por los platos sucios porque cuentan una historia, mientras que otros tienen hambre, comemos bien. Tenemos hogar, salud y felicidad, no deberíamos quejarnos. Por toda esta evidencia, Dios es muy bueno con nosotros. Hoy decido tener una actitud de gratitud.
Leave A Reply