El prudente, es una persona que reconoce el peligro y toma decisiones correctas para evitarlo. El insensato, por el contrario, no repara en ninguna advertencia y no busca dirección para su vida. Clic para tuitear“Ustedes los necios e inexpertos, ¡adquieran sentido común y aprendan a ser prudentes! “ Proverbios 8:5 NBV
La oración es el ámbito especialmente adecuado para oír la dirección y el consejo divino. En oración, Dios nos alerta frente a ciertas decisiones que debemos tomar y “nos avisa” de un peligro para que estemos al tanto. El prudente depende de Dios, no se apoya en su propia prudencia. El imprudente confía en sus propias fuerzas y cuando viene el mal no busca a Dios para enfrentarlo. Clic para tuitear El que tiene sentido común al contrario, conoce sus propias limitaciones y acude de inmediato al lugar de refugio, a Dios.
La Prudencia es prima de la sabiduría. Clic para tuitear “Es una virtud que hace prevenir y evita las fallas”. Prudentes, según la Biblia, son aquellos que saben lo que tienen que hacer y lo hacen en el momento justo.
Proverbios 14:8 “La sabiduría del prudente es discernir sus caminos, pero al necio lo engaña su propia necedad”
La Insensatez es la característica de una persona que actúa con falta de conocimiento. Un insensato es alguien falto de entendimiento, que teniendo una instrucción de Dios se hace el necio.
Santo Tomás de Aquino dice “la prudencia es la rectitud del discernimiento en todas las actitudes cotidianas, y la justicia es la rectitud del alma en los momentos más intrínsecos de la vida; muchas veces estas dos virtudes se entrelazan y forman una integridad sin precedentes”
2 Timoteo 4:5 “Tú, por el contrario, sé prudente en todas las circunstancias”
Si luchas debido a todos los problemas que hay en el mundo y en tu vida, y te sientes decepcionado con la gente con la que es difícil relacionarse, esta es la solución: ten calma y serenidad.
Cuando surgen los problemas en nuestra vida, con demasiada frecuencia solemos desalentarnos, diciendo: «¿Qué puedo hacer? ¿Qué puedo hacer? ¿Qué puedo hacer?» Inmediatamente reaccionamos en vez de buscar la dirección de Dios.
Prudente es el que sabe hablar a tiempo y callar en el momento oportuno. El sabio Salomón, entre sus múltiples reflexiones, dijo que había tiempo para todo: para callar y para hablar.
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