“Los pasos de los buenos son guiados por el Señor. Él se deleita en cada paso que dan. Si se tropiezan, no caen, porque el Señor los sostiene con su mano” Salmo 37:23-24 NBV
Muchos de nosotros vivimos en medio de dificultades, momentos que no quisiéramos que estén en nuestras vidas. Hace mucho tiempo, un rey colocó una gran roca obstaculizando un camino. Entonces se escondió y miró para ver si alguien quitaba la tremenda roca. Algunos de los comerciantes más adinerados del rey y cortesanos vinieron y simplemente le dieron una vuelta. Muchos culparon al rey ruidosamente de no mantener los caminos despejados, pero ninguno hizo algo para sacar la piedra grande del camino. Luego, un campesino vino y llevaba una carga de verduras. Al aproximarse a la roca, el campesino puso su carga en el piso y trató de mover la roca a un lado del camino. Después de empujar y fatigarse mucho, él lo logró. Mientras recogía su carga de vegetales, notó una cartera en el piso, justo donde había estado la roca. La roca contenía muchas monedas de oro y una nota del mismo rey indicando que el oro era para la persona que removiera la piedra del camino. El campesino aprendió lo que los otros nunca entendieron: Cada obstáculo presenta una oportunidad para mejorar la condición de uno.
Cuando nosotros tenemos problemas, Dios nos da la oportunidad de conocerlo como nuestro consolador. ¿Cómo reacciono a las situaciones que tengo por delante? Si queremos ver oportunidades en vez de problemas, tenemos que hacer cambios y ajustes en nuestras vidas. No hay cambio hasta que nos lo propongamos, pues por dentro tú te determinas a cambiar. Ya no solo con palabras sino con hechos.
“Mis planes para ustedes solamente yo los sé, y no son para su mal, sino para su bien. Voy a darles un futuro lleno de bienestar.” Jeremías 29:11 TLA
Esta es una promesa. De repente, has sido maltratado por tu pasado, pero tengo una buena noticia para ti, tu futuro contiene una promesa y Dios te va a dar algo nuevo. La promesa de tu futuro se hará realidad a la medida que pongas de tu parte y realices cambios en tu vida. Eso te dará resultados.
No solo es hablar positivo, ni confesión sin acción. Es decir, ponle alas a tu FE, tienes que convertirte en un hacedor de la Palabra. No importa cuánto confieses algo porque si no le pones acción, es una ilusión.
Con el ajuste que hagas en tu vida… las cosas cambiarán. Confrontar la realidad tiene un efecto poderoso, pues cuando aceptas tu responsabilidad inevitablemente te diriges hacia el éxito. Dentro de la realidad de algo siempre existe la posibilidad de un milagro y cuando tienes a Dios de tu lado, aún con la experiencia del fracaso, tienes las de ganar porque Él ordena los pasos de los justos. Por eso, cada dificultad puede ser un trampolín para un próximo nivel en tu vida. Después de la lluvia, viene el Arco Iris.
Recuerda que, aun en los momentos de necesidad, Dios nunca nos ha hecho faltar nada.
No permitas que el temor te controle
2 Timoteo 1:7 NBV “El Espíritu que es don de Dios, no quiere que temamos a la gente, sino que tengamos fortaleza, amor y dominio propio”.
La fe y el temor son opuestos. Muchas veces el enemigo quiere poner temor sobre muchas cosas, como para emprender nuevos retos, por ejemplo. Atrévete a salir a cambiar, a empezar algo otra vez, si no puedes hacer nada (quizá es un imposible) confía que Dios hará algo. Tengo la confianza que, si Dios no abre el mar ante mis ojos, me hará caminar sobre las aguas. Con esto te digo, si tenemos a Dios a nuestro favor no hay que tener temor de nada. Sigue caminando hacia lo próximo que Dios te dará. Pisa fuerte porque vas a paso seguro.
No tienes ni idea, pero sabes que esta no es tu conclusión, no te quejes todo el tiempo, cree que Dios está contigo.
Nunca dudes en las tinieblas lo que Dios te dijo en la Luz. Dios nos dijo que estaría con nosotros cuando todo estaría mal. Eso lo probamos cuando todo se nos está viniendo encima.
No presentes más excusas
Hoy fue el último día de excusas. Toma responsabilidad de tus éxitos y de tus fracasos. No fue la culpa de nadie… No presentes más excusas para hacer lo que tienes que hacer. No digas que no entiendes, no te sientes a llorar tus penas, se te van a ir los años, créele a Dios.
No permitas que el fracaso se interiorice
Proponte que lo que pasó afuera no se te meta adentro. Lo que pasó afuera, afuera se queda. ¡Perdona! Olvídate de lo que pasó. Te botaron del trabajo… Dios tiene algo mejor para ti. Saca eso de tu vida, del sistema. Dios tiene un futuro y tiene una esperanza para ti. Dios te trajo aquí a nuevos comienzos, a nuevas oportunidades. Niégate a verte como un fracasado. Levanta tu rostro en alto.
Se aprende mucho del fracaso. Aunque no es divertido, son necesarios los tropiezos, para que no repitas el examen.
Todo aquel que ha logrado éxito, tuvo que atravesar por un fracaso.
Albert Eistein fue botado del colegio por lento.
Vincent Vangoh no vendió ni solo cuadro en toda su vida, pero hoy sus cuadros cuestan millones.
Elian Caro perdió 250 carreras de caballos antes de ganar la primera carrera.
De ti aún no se ha escrito nada, pero si estas leyendo esto es porque todavía NO TE HAS RENDIDO. Niégate a verte como un fracasado. Todavía te quedan oraciones que nos has hecho. Todavía te quedan dos golpes más que dar, dos puertas más que abrir.
No dejes de crecer
Gente sabia se examina para ver qué tiene que mejorar. Tus áreas más débiles pueden mantenerte más lejos de tu éxito. CAMBIA, mantente creciendo, este año haz algo diferente. ¿Cómo trabajas tus debilidades? Si cambias hoy, mañana disfrutarás del éxito. Dios hoy te da una nueva oportunidad para empezar tu vida.
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