Todos nos enfrentamos a situaciones que parecen imposibles, lo fácil es desalentarse, y pensar que las cosas nunca funcionarán, pero la Biblia dice que Dios va delante de nosotros enderezando los caminos torcidos. Quizás hoy no tienes las conexiones para lograr tus sueños, pero no te preocupes, porque Dios va delante de ti preparando a las personas correctas. Todo pasa por algo, y lo que no pasa también es por algo. Dios está organizando los avances correctos, las oportunidades correctas, las puertas correctas.
Salmos 23:3 TLA “Me das nuevas fuerzas y me guías por el mejor camino, porque así eres tú”
Puede que hoy hayas perdido el trabajo, o quizás te recortaron el sueldo, es fácil volverse negativo y pensar que nunca cambiarán las cosas, pero tenemos que entender que esa pérdida no lo toma por sorpresa a Dios. Y es que tenemos que entender que Dios no está en el cielo rascándose la cabeza y pensando: “Oh no. ¿Qué hago ahora?
Dios ya ha escrito cada día de tu vida en su libro, Él conoce tu futuro. Sabe lo que vives, sabía cuándo exactamente ibas a tener ese revés en tu vida, así que cuando aparece el problema, Dios ya tiene la respuesta.
Dios siempre se anticipa a lo que nos sucede. La enfermedad te pudo haber tomado por sorpresa, no sabes ni qué hacer, pero Dios si sabe. Él será tu médico de cabecera.
Si permaneces con tu fe en Dios, y con la actitud correcta, entrarás en un capítulo mejor de tu vida. Las pruebas tienen un inicio y también un termino. Dios prometió pelear nuestras batallas. Si tu informe médico te tiene preocupado, confía que Él te guía a un mejor camino, camino de sanidad, camino de restauración y victoria.
Deuteronomio 9:1-3 TLA “Moisés continuó diciendo: «¡Israelitas, pongan atención! Pronto cruzarán al otro lado del río Jordán, y expulsarán de esa tierra a todos los pueblos que allí viven. Esa gente es más fuerte y poderosa que ustedes, y sus ciudades son grandes y están bien protegidas con altas murallas. 2 Entre ellos viven los descendientes del gigante Anac, y la gente cree que son invencibles. 3 Pero ustedes saben que nuestro Dios marcha al frente de nosotros. Su poder es el de un fuego destructor, y con él derrotará y humillará a esos gigantes. Por el poder de Dios, ustedes podrán vencer a esa gente y la expulsarán de allí enseguida, tal como Dios lo ha prometido.”
Tu situación puede ser tan complicada, los problemas más grandes y poderosos que tú, un problema legal con alguien más grande que tú, una deuda que es más de lo que tienes ahorrado. Pero Dios va delante de ti ¿quién es más grande? Sí, puede que parezca imposible que la salves, tus desafíos de vida son grandes, las probabilidades pocas, pero esto no se trata de ti, Dios va delante.
Y si Dios va delante tengo la victoria asegurada.
Si Dios va delante no me preocuparé más por mis “no puedo”, Él lo puede todo.
Dios tiene la última palabra en mi vida, Él ha prometido que cruzará conmigo, irá delante de mí y derrotará a mis enemigos. Me pongo de acuerdo con la agenda de Dios sobre todos mis asuntos, ya no serán mis planes serán los planes de Dios, ya no serán mis cargas, prometo descansar en Dios.
Con Dios delante de mí, no le temo al futuro, Él va enderezando los lugares torcidos.
Dios sabe lo que hace, Él ve el cuadro completo.
Dios nunca nos prometió una travesía suave, pero sí nos prometió una llegada segura.
A veces, Dios permitirá desafíos solamente para mostrar su bondad de una manera mayor.
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